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Nació en Talara (Piura). Editor y gestor cultural. Estudió Sociología en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos e ingeniería electrónica en una universidad privada. Ha publicado poemas en las revistas: Ónice, Bocanada, Dedo Crítico, Tajo, Bosque de latidos, Socialismo y Participación, Estudios Privados, El Bosque, Delirium Tremens, TXT, Conexos (Miami), Nomastique (México), Signos en rotación y Círculo de fuego. Traduce poesía norteamericana (Snyder, Rexroth, Sandburg). Poemas y relatos suyos aparecen en la revista digital Ping Pong, de República Dominicana, y en Vorágine y Cinosargos (Chile). Ha publicado el poemario La balada de Crates y otros poemas en el 2010, Como barca encallada en la arena (poemas y relatos), en el 2014, y Senda de la desesperanza. Hace entrevistas y es colaborador de revistas de Ciencias Sociales y Derecho (Illarik, Soluciones Laborales, Administración Pública & Control) y publicaciones alternativas. Editor de Anarkopoiesis, La lira rebelde libertaria e Insana virtud. Muestra poética reciente de la posmodernidad (2016). Sus poemas aparecen en Ausente ardor de arena & algarrobos. Antología de la poesía piurana contemporánea (2017).

lunes, 5 de noviembre de 2018

Poética acracia

A un viejo profesor anarquista


tu sombrero ingobernable
guarda en la memoria
himnos  voces estentóreas
de 1930
cuando embestías sin odio
contra símbolos infames
de tiranía y opresión…

tu sombrero dinamitaba
estatuas de orgullosos generales
mientras negras banderas
entonaban altivas  cantos libertarios

NI DIOS NI AMO

para tus ojos refractarios
añorando huelgas de tranvías y productores
esquilmados
en Londres  Chicago  Vitarte
violentamente  reprimidas
sables cortando  con fruición
desgarrando  la piel  el viento
mientras es tiempo de impugnar
con rabia  su odiosa autoridad
y voces desgarradas
de hombres y mujeres inermes
todos eternamente jóvenes
como tú
cantando
trazando surcos sobre la tierra
disparando
desafiando sus leyes
escribiendo contra los gobiernos
organizando
aboliendo las patrias
leyendo poesías de futuro
soñando
amándose libres
destruyendo las cadenas
y cayendo ante furiosas balas certeras
Eternamente invictos……..




Un mito deleznable

    El mito dice que, por estas latitudes, el anarquismo se extinguió indefectiblemente en 1930. Su ciclo habría terminado cuando se fundó el Partido Aprista y el Partido Comunista (luego de la muerte del Amauta). Luego de conseguir la jornada de ocho horas en el Callao (1913) y en todo el país (1919), el anarcosindicalismo habría terminado absorbido por el llamado "Partido del pueblo". Esto no niega el hecho de que muchos anarquistas se volvieron apristas (v. gr., Adalberto Fonkén).

    Los historiadores oficiales olvidan deliberadamente que La Protesta, el principal órgano del anarquismo de la región peruana, siguió apareciendo en la década de 1930 y en años posteriores (en una segunda etapa hacia 1947-1948 como órgano de la Federación Anarquista del Perú). Hubo núcleos anarquistas en Lima y fuera de la capital. El compañero Teobaldo Cayetano Morales perteneció a una célula anarquista llamada “Brazo y cerebro”, adscrita a la Estrella del Perú (importante gremio de panaderos). Cayetano llegó a alcanzar la secretaría regional (Lima) de la Estrella del Perú, en 1963. Hasta comienzos de los 60 operó la Federación Anarquista del Perú que editó el folleto “El anarcosindicalismo en el Perú”. Wenceslao Zavala Grimaldo fue secretario general de esta. En los 70 hubo núcleos anarquistas entre los panaderos de Chorrillos.

    El Instituto de Estudios e Investigación de Cooperativas y Comunidades (Indeicoc) fue un centro de inspiración socialista libertaria surgido a comienzos de los 70. Uno de sus postulados centrales era el siguiente: “El individuo como objetivo final de la sociedad y no como medio, lo que implica reconocer la calidad igualitaria de todos los hombres y el derecho a su plena libertad –entendida esta como supresión de cualquier forma de dominación– (económica-social-política-cultural), donde la ayuda y colaboración mutuas sean principios morales rectores”. En el Indeicoc se discutían temas caros al pensamiento libertario. Jaime Llosa, Gerardo Cárdenas, Víctor Gutiérrez Saco, entre otros, fueron sus principales animadores.

    Hacia el 2010, anarquistas de Lima establecieron nexos y coordinaciones con gremios y sindicatos, algunos surgidos a partir del 2007. Se llevó adelante una coordinación eficaz de acciones incluso a nivel internacional. Se involucró a compañeros sindicalistas de la CNT.

    El anarquismo presenta un proyecto cultural que a comienzos del siglo XX resultó muy eficaz para amalgamar voluntades y esfuerzos (testimonios concretos son las sociedades de resistencia creadas, las bibliotecas obreras, centros de estudios sociales, teatro obrero, etc.). Como ideología política, su crítica al Estado nación todavía está vigente. Pero, además, se trata de un ethos para la vida y acción.

El mito ha sido, por lo tanto, desmontado.

Márlet Ríos